- La cabeza del pene tiene sensibilidad debido a las delgadas membranas mucosas en la superficie, a las cuales muchas terminaciones nerviosas están muy cerca. Sin embargo, la cabeza sigue siendo un área sensible solo mientras haya un prepucio que la proteja de la fricción con la ropa. Si un hombre está circuncidado, la piel de su cabeza se volverá más gruesa después de un tiempo, y la estimulación de esa parte del cuerpo ya no causará una reacción tan violenta como la que podría haber observado antes.
- Frenillo: ubicado en la región del glande del pene. También es una zona de mayor sensibilidad, pero requiere una actitud cuidadosa. Los movimientos descuidados durante la estimulación pueden lesionarlo fácilmente.
- Los testículos, como un frenillo, requieren una estimulación suave. Apretar demasiado fuerte puede lastimar a su pareja, y toda la experiencia del coito se arruinará irremediablemente.
- La región del perineo: curiosamente, también es un punto G masculino, pero no por la gran cantidad de terminaciones nerviosas, sino por la proximidad a la próstata, cuya estimulación también es agradable.
- Ano: a pesar de la fuerte actitud negativa de muchos hombres hacia acariciar esta parte particular del cuerpo, también es sensible. Así que si a tu pareja no le llenan la cabeza con todo tipo de prejuicios, puedes esparcir la estimulación allí también.